El Jefe de Gobierno de Marruecos, Aziz Akhannouch y el Presidente de la República Federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier en Berlín.
Importantes puntos a tener en cuenta
Con un mundo convulsionado como el actual, en Europa la guerra de Rusia contra Ucrania, la mas reciente en Oriente Medio, más el accionar terrorista en distintos puntos del globo; nos define que en este escenario es menester una nueva lista de requerimientos para proyectar el desarrollo de una región, un país o un continente.
Hasta hace un tiempo atras un posible inversor analizaba, entre otras cosas, si tenía para su proyecto: agua potable, energia electrica, gas natural, buenas carreteras, puertos, aeropuertos, créditos y/o descuentos impositivos y reglas de juego confiables. Ahora el inversor agrega a la lista chequear la posibilidad de accionar terrorista en ese lugar.
Por eso se comprende que los mismos interesados en la integración para el desarrollo de África, trabajen activamente en la prevención de cualquier actividad violenta que imposibilite la inversión y el crecimiento y de esta manera perjudiquen la posibilidad de un mejor nivel de vida para toda su gente.
El encuentro de Cotonou
Enfocados en esta problemática es que, mientras en Argentina viviamos los días previos a la elección presidencial, nos enteramos que en una ciudad africana llamada Cotonou, la principal ciudad de Benín, aunque la capital es Porto Novo; se reunía el Grupo de Enfoque de África de la Coalición Global contra Daesh.
Teniendo en cuenta que: los grupos afiliados a Daesh constituyen «una amenaza persistente para las poblaciones de África Occidental», según una declaración conjunta de los 28 miembros y observadores de la coalición copresidida por Marruecos, Italia, Arabia Saudita y Estados Unidos; centrada en los desafíos de seguridad regional y antiterrorismo que plantean los grupos afiliados a ISIS en la región costera de Africa Occidental.
Los debates se centraron en la coordinación con otras iniciativas multilaterales, subraya la misma fuente, añadiendo que los participantes en la reunión de Cotonú fueron informados de los esfuerzos desplegados por los socios de la coalición que participan o lideran la Iniciativa: Accra, el G-5, el Sahel. Coalición y el proceso de Aqaba.
La Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo, que tiene estatus de observador dentro de la Coalición, proporcionó una actualización sobre la cumbre africana prevista para la primavera de 2024, que se espera complemente los esfuerzos internacionales para contrarrestar a los grupos afiliados a Daesh en África.
Para fortalecer su impacto, el grupo está centrando sus esfuerzos en los cuatro pilares de su plan de acción, a saber, fortalecer y mejorar la seguridad fronteriza, la recopilación biométrica, contrarrestar la propaganda de Daesh y los esfuerzos para reclutar y desarrollar la resiliencia comunitaria, mejorar las capacidades de los miembros de la Coalición para reducir las fuentes de financiación ilícita para ISIS y contrarrestar las influencias malignas que obstaculizan los esfuerzos antiterroristas.
Finalmente, los copresidentes del grupo afirmaron que la Coalición Global Contra Daesh sigue comprometida a enfrentar y derrotar a ISIS en África Occidental y en otras partes del mundo.
En nota anterior, analizamos lo planificado por el rey Mohammed VI con respecto al desarrollo para la integración de los estados africanos del Atlántico, a partir de obras como el gasoducto desde Nigeria a Marruecos y otro importantes proyectos que como sabemos lograran el doble objetivo de desarrollar la región y favorecer la convivencia en paz del continente. Para lograrlo viene muy bien que potenciales inversores se interesen en participar y por eso viajó a Berlín el jefe del gobierno marroqui, Aziz Akhannouch y fue recibido por el Presidente de la República Federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, junto a los Jefes de Estado y de Gobierno participantes.
Marruecos se encuentra en una trayectoria planificada y desarrollada que sigue posicionando al Reino a la vanguardia de la emergencia africana, afirmó Pascal Lamy, presidente del Foro Marítimo Mundial y ex director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
El pasado lunes, el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Internacional y Gambianos en el Extranjero de la República de Gambia, Mamadou Tangara, reiteró en Rabat el apoyo de su país a la marroquidad del Sáhara.
En una rueda de prensa tras sus entrevistas con el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, el ministro gambiano reiteró la posición «inequívoca» de su país respecto a la soberanía de Marruecos sobre su Sáhara.
Recordando que su país fue uno de los primeros en abrir un consulado general en Dajla, Tangara aseguró que Gambia siempre ha estado al lado del Reino en la defensa de su integridad territorial y su soberanía sobre su Sáhara.
Por otra parte y también durante este mes en una reunión de seguimiento del «Llamamiento de Tánger», organizada al margen del Foro MEDays, cinco ex ministros africanos de Asuntos Exteriores firmaron el «Llamamiento», lanzado el 4 de noviembre de 2022 en Tánger.
Se trata de David J. Francis, Urbino Botelho, Ezechiel Nibigira, Albert Mabri Toikeusse y Cheikh Tidiane Gadio, respectivamente ex jefes de las diplomacias de Sierra Leona, Santo Tomé y Príncipe, Burundi, Costa de Marfil y Senegal, e iniciadores de las mesas redondas regionales sobre la expulsión de la pretendida «rasd» de la Unión Africana.
Con los nuevos firmantes, son ya 23 los signatarios del «Llamamiento de Tánger» desde que se lanzó hace un año.
En esta ocasión, los firmantes del «Llamamiento de Tánger» se felicitaron por el impacto continental y el impulso generados por esta iniciativa y expresaron su deseo de reforzarlos aún más, al tiempo que reiteraron su compromiso de seguir trabajando por la «exclusión urgente» de la pretendida «rasd», entidad no estatal, de la Unión Africana.
El compromiso creciente en África a favor de la marroquidad del Sáhara también fue puesto de relieve por los firmantes, que subrayaron que la apertura de varios consulados generales en Dajla y Laayún atestigua la vitalidad del diálogo panafricano y la voluntad común de superar las divisiones, heredadas del pasado, para construir un futuro próspero en África.
Los firmantes del «Llamamiento de Tánger» reiteraron también su pleno compromiso y su movilización para alcanzar el objetivo de expulsar a la pretendida «rasd» de la Unión Africana, condición sine qua non para restaurar la imparcialidad y la credibilidad de la organización panafricana sobre la cuestión del Sáhara marroquí.