Opinión. YAYO H-El Cine del Domingo 23///20 de Octubre /11

1-Este domingo, pensemos que todos los mayores de 18 años vamos al cine. Al salir, después de la película, cada uno pensará y comentará, “ya la vi en agosto”.

2- Los jóvenes o la mayoría de ellos, y quienes trabajaron en el film estarán exultantes, ya que cuando los cines cerraron, o el dinero no alcanzaba para las entradas, nadie los tuvo presente. Claro que debemos desterrar de este caso, a los que tienen entradas gratis y se las han arreglado para trabajar hasta de utileros en más de una película y con diferentes directores. Y a aquellos críticos de arte, que cobran a los hacedores del film, para que la película resulte mejor de lo que en verdad es. Los que no cobran y pagan entrada no habrán de influir, están fuera de cualquier apreciación real por parte de los hacedores, y sus críticas no importan.

3- Habrá quienes salgan decepcionados, no asumiendo del todo sus propias realidades, ya que intentaron una película que nunca llego a estrenarse, por diferentes razones. Tendrán cuatro años, para volver a rodar un largometraje.

4- La película del domingo, hablará de Perón, aunque Perón no aparezca. Comunicará logros emocionales ciertos, y obviará asumir errores y torpezas. Pero habrá tiempo hasta el próximo estreno de remediarlo, los errores y la torpezas, digo, esta vez, pensando en cada uno de los que pagó la entrada, tanto en los que aplaudieron de pié el final epopeyicamente musicalizado del domingo, y en quienes se marcharon decepcionados, creyendo que pudo hacerse una obra mejor.

5-Cada uno retornará a sus casas, o irá a cenar, o verá otra película de ficción, o tendrá sexo, o alcanzado por el insomnio, trabajará de noche. Esa misma noche, y fuera de festejos vecinales, en el fondo, la vida de nadie cambiará.

 

Hasta aquí la metáfora. Lo cierto es que a la sociedad, salvo la inseguridad, el empleo o lo asistencial, la vivienda, y mínimamente la inflación, no le importará demasiado, mientras subsista la continuidad de planes a 50 cuotas. Otra cosa no habrá de interesarle. Hay una crisis global en ciernes, pero el argentino medio no reaccionará, hasta que le toque. No teme a la inflación tanto como a la posible falta de trabajo. Ni siquiera se plantea que un gobierno no es lo que parece sino que está constituido por tres poderes. Y la razón del resultado del domingo es que uno de esos poderes, aparentemente funciona bien o hizo las cosas mejor, mientras que los otros dos, el legislativo y el judicial, han fracasado, de hecho, cualquier oposición se encuentra en estos últimos poderes, y más que nada en el legislativo. Una lectura nada menor está dada en los partidos políticos, quienes como oposición son percibidos huecamente, vacíos, sin el contenido esperado desde el 2001 hasta aquí. No son culpables ni responsables, los parió una historia desde el alfonsinismo hasta ahora, que no los dejó madurar lo suficiente para aprender de las equivocaciones. Desfasaron una Democracia que supo dar oportunidades. Que lo acepten es un principio, que se victimicen, es caótico.

La película del domingo, aunque repetida, va a ser ovacionada, porque el resto de los directores no terminaron las suyas, y aunque tuvieron tiempo, compitieron con cortometrajes, lo que para este domingo, no estaba permitido. Olvidaron que los hechos son el punto de partida de los logros, y no las palabras.

¿Por qué vamos a tener el mismo Gobierno?

1-Porque hizo las cosas mejor que el resto. Con sus errores, y aun con lo que no ha podido o no ha querido corregir, la corrupción por caso, y una desmedida concentración de poder que al tipo de las 50 cuotas no le interesa.

2-Porque acertó con el consumo interno en el momento más necesario, y el decurso de la política internacional hasta ahora contribuyó a que eso fuera posible, y fue hábil en desarrollar un discurso social que estuvo ausente por años, exacerbándolo hasta un dominio que ni siquiera molesta. Aunque todavía no enfrente que las cosas buenas se terminan, sino se es previsor.

3-Porque un empresariado que todavía no es reconocido como tal, colaboró, y está cambiando, aunque muy diversificadamente, pese a tener reparos, tanto como mala prensa. Digamos que hay Grupos Amigos, y Empresarios enemigos. De unos y de otros, todos vivimos, el Gobierno también. Y ni unos ni otros, beben agua bendita.

4-Porque la economía, aunque ficticia, se impuso sobre la política, con lo cual, la política exigió poco, a tal punto que la oposición no logró sincerarla, o no encontró los caminos para hacerlo. El problema es que tiene delante un Gobierno hegemónico, concentrado, cerrado, y con fondos,  al que no puede des-hegemonizar. Es como que la cooperativa de pobres de la cuadra quisiera comprar la mansión del rico, cuando ni siquiera tienen acceso a conversar con el chofer del poderoso.

5-¿Que puede salvar la cuadra? Que el poderoso esté convencido que en esta oportunidad, tiene que hacer lo que sabe que hasta ahora no ha hecho, y es necesario terminar…o comenzar. Son inocentes los que creen, son culpables los conscientes.

Definitiva y necesariamente, resulta imprescindible que en algunas cosas, el poderoso, frente al espejo, los espejos nunca mienten, cambie lo que sabe que está adeudando y adeudándose, y que en esa lucha propia, lo humano devore al ego.

 

YAYO HOURMILOUGUE.

LA 5PATA

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Autor entrada: Editor

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