EDITORIAL. YAYO H.-“LA REVOLUCIÓN”.-LA5PATA.

Es verdad, Néstor Kirchner tomó un país en ruinas, pero Ella no.

Luego que Duhalde, y Remes y Todesca y muchos más, pagaran cada costo de sinceramiento económico tras la devaluación, asumió Néstor.

El traspaso de mando que ayer no fue, es un tema menor, si consideramos quien es la mujer que se retira: Por un lado, es una Presidenta con Mandato Cumplido, electa, por otro, una mujer  que se va con el despecho de los grandes personalismos. Y ningún despecho, perdona.

Nos trató acaso, como la trataron a ella. Quien sabe, eso dice cada manual. Pero, ¿a quién le puede importar ahora? Salvo a la Justicia.

Se trató de temas con los que obligadamente, intentaron confundirnos, y tapar otros fines. Sabemos que las Revoluciones son cambios necesarios que se adaptan y modifican estructuralmente a las sociedades de cada época. Imprescindibles en cada una de ellas. Aunque en ningún caso, hubiera sido necesario de 2003 hasta este 9 de diciembre de 2015, salvo por la necesidad propia de quienes gobernaron.

Hoy, seguramente Carlos Marx hubiera sido marxista con métodos y discurso obligadamente diferentes. ¿Quién nos asegura que una Revolución debe ser violenta? Lo creyeron entonces, pero ¿Qué dirían hoy en un mundo de economía global, el creador del Manifiesto Comunista y El Capital, y sus colaboradores y adeptos? Seguramente, insistirían con el eje de semejante creatividad solo los teóricos de entonces, los violentos de los 70, y los violentos de ahora. Y en menor medida, los Románticos de siempre.  Marx creó el concepto y escribió sobre la revolución desde el Materialismo Histórico, en tanto lo que sucedía era la Revolución Industrial y la injusticia, consecuentemente, la desigualdad.

Marx murió, la injusticia y la desigualdad sobrevivieron hasta estos días.  Lo único que prosperó hasta convertirse en otras revoluciones, fue precisamente la revolución industrial, y con ello cada sociedad.

En 70 años el mundo avanzó más que en los últimos siglos. Y en las últimas tres décadas, algunos países, y Argentina se estancaron social (Pobreza= 25%) y políticamente, pese al esfuerzo impecable de la comunidad científica, debido a que fue una de las pocas buenas inversiones del anterior gobierno, y a contramano de Cavallo y Menem. Lo imagino a Marx hoy, al frente de un emprendimiento por su valor teórico, o sin trabajo, ya que hasta donde sabemos al tipo no le gustaba laburar y provenía de una cuna bastante acomodada. Pero no lo imagino robando a los que trabajan, sobre todo  desde cargos gubernamentales voraces, en un mundo que eliminó la lucha de clases. Marx, de 2007 a 2015 ¿Qué rol hubiera cubierto? Seguramente no hubiera sido Cristinista, al menos por lo que escribió, no tanto por lo que hizo. Pero esto es ficción.

Hoy la revolución sería, ¿cómo dominar la era tecnológica, sin el conocimiento?

En la Argentina de estos años, si comparamos lo hecho con lo relatado oficialmente, hay  Des-Revoluciones. El término aún no existe, pero está instalado. Nos sucedió aquí en las últimas décadas, le sucederá a Venezuela en breve, acaso la Revolución siga implicando resistir contra el autoritarismo, una resistencia que proviene de la Reparación, encarnada en la clase media, cuál otra sino, es decir, por quienes verdaderamente trabajan y creen en la Educación. Tanto como para que no vuelvan a engañar a nuestros jóvenes, sobre todo cuando quienes llegan confunden desde un principio situaciones evidentes, tales como que de cada Frustrado podían hacer un Revolucionario. Se les concedió así, desde 2003 todo lo que necesitaron sin ganarlo. Y no me refiero aquí a la AUH, no. Sino que ninguna Revolución se fabrica desde un ejército que será el sostén movilizador de cada delincuente politizado.

La Plus Valía de Marx, pasó a formar parte de las cuentas del entorno más directo de  cada funcionario  progresista. Se reforzó desde 2007 con ingresos de todos, y únicamente para quienes debían creer en ellos, despreocupándose así de cualquier  política socialmente adulta que demandaba la democracia en nuestro país.

Aún quedan los restos de una Ideología Promiscua que pretendieron dejarnos días atrás desde un discurso inevitablemente enfermo, sobreviviendo en medio de los escombros del relato. Como si al argentino que trabaja, le sirviera de algo. Lograron dividirnos cuando necesitábamos estar más cerca y más juntos que nunca. Oportunidades  perdidas que ahora hay que salir a reconstruir. Se respira en el aire un rechazo que emerge incluso desde el propio justicialismo, ni que fuera humo de pólvora, ahí donde hubo traición, donde sobro desdén. La mujer que pasó por aquí no perdonara a quienes  se nieguen a adorarla en sus recuerdos. Pobre mujer que la historia recordara por el intento violento de eliminar las mayores libertades institucionales.  Dijo que espera que No haya Censura, mientras saboteó cada programa libre que no fuera de la pertenencia del gobierno o de sus amigos empoderados por ella misma. Pobre Marx, nunca tan mal leído, jamás tan mal readaptado. Pobres resabios Camporistas, que confundieron poder y fanatismo con política. Y pobre Perón, que para el interés de la farsa nunca ha muerto, lo reviven permanentemente por plata.

Nunca una funcionaria tan rica, costo tantos pobres.

Seguirá convencida que el Parnaso le asignó una tarea.

Hasta tuvo que vender dioses muertos. Me imagino una mujer doblegada, sumisa ante la pesada intolerancia machista. Hasta que llegó la oportunidad de la liberación, y hubo una negociación. Entonces la sentaron en el poder, y salieron todos los demonios.

Pero ese tiempo, ya es pasado, y eso es lo revolucionario.

YAYO H

LA5PATA

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Autor entrada: Editor

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