Yayo H.-“Sin pérdida de tiempo y de memoria….”

En horas comienza la veda electoral.

Me reconforta saber que nuevamente elegiremos un Presidente por 4 años. Pero necesito recordarme; Tuvimos una Dictadura. Y una guerra malvinense absurda. Y una Democracia que supo desplazarla. Llegó un Alfonsinismo durante el que acaso nos faltó la suficiente madurez como para interpretarlo cabalmente, de hecho no ha vuelto a surgir un discurso tan proporcionalmente constitucional con tanto respeto por las instituciones y la división de poderes. Por una diversidad a la que fuimos ajenos.

Pero hoy algunos sabemos que entonces nos equivocamos, y que nos distrajimos, y decidimos el Menemismo, y la Alianza, y varios presidentes como una ráfaga innecesaria, y un Duhaldismo que pagó los costos de una mega devaluación que Néstor Kirchner aprovechó en su primer mandato. En su gestión se pasó de 9000 millones de dólares de Reservas, a más de 52.000 millones. Pero lo que siguió hoy puede sugerirse como su antítesis.

Una riqueza que el Cristinismo dilapidó, con un dólar de 3,50 en 2011, y que llevó a 15 pesos por estos días, aunque les sobra hipocresía para negarlo. Una mandataria que trató al país con síntomas inexplicables, por etapas, como si se tratara de un esposo, no de una sociedad. Enfermizamente, «Fuimos alguien de su pertenencia».  Con una exorbitante capacidad de amor/odio. Personalismo que dividió a la ciudadanía, porque para eso son los personalismos. Haciendo de los DDHH la exacerbación de un amiguismo comprometido con un proyecto ideológico antes que con una causa humana, derechos disociados día a día de la realidad diaria. Discursos sobre políticas comunitarias con una pobreza estructural del 25%. Y micro devaluaciones diarias.Y una secretaria del Pensamiento Nacional costosa, acerca de la que nadie nos consultó, mientras perdíamos 10 millones de vacas y las frutas se pudrieron en cada planta. Con trabajadores supuestamente ricos, que pagan ganancias que vacían sus bolsillos.

Han quedado dudas en estos años, junto a una justicia tan invadida como endeudada; Hasta hoy nos resulta tan sospechosa la muerte de Kirchner, como la del fiscal Nisman. Y han quedado decepciones. Los logros alcanzados no correspondieron al poder ejecutivo, sino a las exigencias y adaptabilidades sociales, al crecimiento colectivo, antes que al gobierno.

Aunque en cada caso el Cristinismo, de una mediocridad trascendente y eso es lo más inexplicable, haya capitalizado lo que solo nunca hubiera podido hacer por sí mismo ni por nadie. Este gobierno se aprecia mejor por los vetos, como la ley de glaciares y tantos otros, antes que por la construcción. Todavía, en esta campaña oficial, hay quienes critican la soberbia sin saber que provienen de ella, hijos de ella, aun así, intentan, pretenden, demostrarse diferentes. Más; la construyeron a puro interés personal. Ciegamente destinados, fueron parte de tanto desdén político. Acabaron con la política. Y con la economía. Destruyeron posibilidades irrecuperables hoy. Y por eso carecen de respuestas, salvo por la utilización que les otorga, la mendacidad de ser supuestos inocentes.

Valoro la Libertad y las Disidencias. Y estas poderosas razones, me impiden regresar a etapas recientes. Y ese es el argumento por el que no voy a votar a continuismo alguno. Sencillamente, no debo hacerlo. Este Cristinismo, más no ha podido dañar. Se trató de un gobierno perverso, valiéndose de ejércitos de anti periodistas, y funcionarios corruptos. Mi crítica de construcción tuvo un precio, no dudaron en retirarme cada acompañamiento público institucional ganado durante años. Y hasta presionaron a empresas para que también lo hicieran. En Nación y en Provincia de Buenos Aires. Mujeres y hombres, funcionarios y terceras lineas que mientras más robaron, mas fueron perdiendo la vergüenza, y el miedo, y alcanzaron así la impunidad. Pero no lo supieron, porque la impunidad tiene una sola virtud; “te viste de algo que desconoces mientras estas ahí”

El mayor miedo entonces, sería continuar como estamos.

Hay que avanzar hacia otras etapas, aquí no hay nada que valga la pena recordar salvo logros sociales por corregir. Y que la Justicia que llegue, haga lo suyo sin demoras. Sin pérdida de tiempo y de memoria.

Yayo Hourmilougue

PERIODISTA.LA5PATA

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Autor entrada: Editor

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